top of page

"En esta isla los hombres tienen cabeza y dientes de perro, y en su fisonomía parecen enormes mastines. Se visten de pieles de animales salvajes, y no hablan lengua alguna, sino que ladran como perros. Son muy crueles y antropófagos y se comen a cuantos hombres prenden que no sean de sus gentes”. Marco Polo.
La isla de los cinocéfalos es una película de cine vivo situada en un terreno baldío en el centro de Medellín. En el año 2003 se construyó, en este terreno, un bazar llamado Bazar los puentes. Con esta construcción se pretendía solucionar el problema de la venta ambulante. Unos años más tarde, el lugar se convirtió en un expendio de drogas y fue demolido en el 2015. Hasta la fecha solo hay una loza cubierta de maleza donde por las noches conviven habitantes de calle y roedores. En las mañanas solo se ve a un vigilante con su perro que deambula por este terreno.
Grabé al vigilante con su perro durante horas. También grabé todos los objetos que me encontraba en el suelo. Estás imágenes constituyen el material de montaje junto con la adaptación del texto de Peter Handke, El vendedor ambulante. La película es presentada en el mismo espacio de grabación por medio de dos camiones-pantalla que están estacionados en el terreno baldío. Sobre la parte trasera de los camiones se proyectan imágenes y textos. Al interior de cada camión habita un cuerpo: un perro y un hombre.
Proyecto comisionado por el Museo de Antioquia dentro del marco de Medellín a cielo abierto.




1/14
bottom of page